Emanuel Werner tiene apenas 20 años, pero cuenta con una nutrida historia de vida. Cuando era un chico, sus padres encararon un complejo divorcio que incluyó denuncias penales y una tirante pelea por su custodia. En el colegio, era a menudo el blanco de las burlas de sus compañeros, que lo consideraban «distinto». En su cabeza, sentía que nadie podía darle la contención que necesitaba.
Todo cambió cuando su madre obtuvo la tenencia permanente. «La jueza me preguntó con quién quería vivir y elegí a mi mamá. Ella representaba para mí la libertad, poder cambiarme a un colegio donde me prestaran más atención, dar vuelta a la página y empezar mi vida de nuevo, fue transformador para mí», dijo en Comunidad de Negocios , el programa de LN+.
Werner considera que las difíciles circunstancias que marcaron su adolescencia ayudaron a definir su carácter y forjaron su espíritu emprendedor. A los 12 creó una red social para mantener el contacto con sus amigos y a los 15 fundó una pequeña firma de marketing digital con el objetivo de juntar dinero para comprarse una computadora.
A los 17 vendió esa consultora y se mudó a Buenos Aires , donde empezó a asesorar a empresas, publicó un libro y se convirtió en orador de TEDx. «Tuve diferentes hitos en mi vida que fueron marcando cambios -dijo-. No creo en el fracaso, tenemos resultados que nos gustan más o menos. Si analizamos el proceso que nos llevó hasta ahí, podemos hacer algo al respecto», sostuvo.
